martes, 12 de mayo de 2009

cacerías necias

puede que ya haya recorrido muchas veces los 2,5 metros cuadrados de cama, pienso en eso que te iba a decir, comienzo a elegir las palabras, las separo, las lustro, las peso, pero no las muerdo, y me doy cuenta que son demasiadas, inmediatamente abandono la idea, me incorporo y me visto de agua caliente, y comienza mi día, comienza mi cacería, mi búsqueda, y vaya si conozco de cacerías necias, se puede decir que casi siempre termino actuando como un perro que se persigue la cola, siempre quiero algo que no puedo alcanzar pero a la vez tengo en mi, soy como un niño grande, soy ese adolescente pisando los 30; camino, cuento pasos, cuento baldosas flojas que decoran la botamanga de mi pantalón de un sucio macramé, y bajo la mirada por que le temo a tus ojos, temo que seas la respuesta a la pregunta que no quiero formular y siento que tu mirada me busca, un calor que me embriaga, me quema la nuca, sigo mi camino y te recuerdo en otra boca y luego en otra voz; y de repente me decís que lees esto y que lo encontras triste, ¿vos crees que es triste? pero si esto es el otoño en pleno fulgor, y en mi barrio al otoño lo llaman soledad; yo me rio de las hojas secas, del amarillo cansino, de los primeros fríos ¿a caso no oyes el eco de mi risa?




1 comentario:

  1. El otoño es folk, el folk es amarillo, el amarillo es bastante pálido en otoño, el olor a estufa es amarillo, el folk es guitarra, la guitarra es triste en otoño.

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