lunes, 16 de agosto de 2010

ya no tengo buena memoria para los malos recuerdos

lo demás, lo de ayer no es más que pasado, otra foto que tomaste del momento juntos pero ni nos miramos, lo de ayer nada más que luces que mareaban; era noche y el sol quiso salir más temprano, se me hizo día de golpe, me convertí en equilibrista caminando por el cordón de la vereda, siguiendo el agua que bajaba como en una canción y allí estaba, confundiendo el perfume, confundiéndolo todo, completándome de a poco en una suerte de deconstrucción, pero no fue suficiente y terminamos en juegos de palabras casi inanes, malgastamos el lenguaje, maltratamos nuestras lenguas, y quiero hacerme banco en la plaza para no tener que seguir … te, me quiero ir a jugar con los gorriones que no exigen más que un puñado de migas y a esa altura soy una palabra no sé bien en que idioma, pero me traduzco al español (por que hablo en argentino) y consigo pronunciarme, me deletreo, para terminar de escribirme sobre un cartón mojado, y me da frío tanta consonante repetida, tanto nombre apagado, pasó el tiempo y ya no tengo buena memoria para los malos recuerdos, ahora sólo cuido semilla de mandarina en su jardín.




1 comentario:

  1. Ouch...

    (Tu texto me parece de lo más bonito y a la vez me deja un gusto a desazón...)

    "ya no tengo buena memoria para los malos recuerdos" (y viceversa).
    Abrazo cazador.

    ResponderEliminar